Proteína 100% basada en plantas - chocolate - 1110 gramos

Uno de los conceptos erróneos más comunes asociados con las dietas basadas en plantas es que su contenido de proteínas es demasiado bajo. Sin embargo, los hechos son muy diferentes. Las proteínas vegetales aportan al organismo no sólo todos los aminoácidos necesarios, sino también una serie de impresionantes beneficios para la salud.

Función biológica de las proteínas

Independientemente de la dieta elegida, las proteínas son extremadamente importantes para el funcionamiento normal del organismo. Son un componente básico de cada célula y se utilizan para construir músculos, reparar tejidos, producir enzimas, hormonas y una serie de otras sustancias bioquímicas. Lo que hace que las proteínas sean aún más importantes es que el cuerpo no puede almacenarlas en forma de reservas como las grasas y los carbohidratos, por lo que deben consumirse constantemente con los alimentos.

Los elementos básicos de las proteínas son compuestos orgánicos con un grupo amino, llamados aminoácidos. Veinte de ellos tienen importancia biológica para los humanos. Se llaman proteinogénicos porque construyen proteínas en los organismos vivos. El cuerpo sólo puede producir once de ellos, conocidos como no esenciales. Los nueve restantes no pueden ser sintetizados por el organismo y deben obtenerse a través de los alimentos, por eso se denominan esenciales o irreemplazables.

Características de las proteínas vegetales

La proteína se encuentra en todos los alimentos vegetales, siendo las mejores fuentes las legumbres y los cereales. La materia prima más popular para extraer proteína vegetal en polvo, como en este producto, son los guisantes amarillos. La proteína del guisante es completa, lo que significa que contiene los nueve aminoácidos esenciales. También es una excelente fuente de hierro, un oligoelemento que juega un papel clave en el transporte de oxígeno y dióxido de carbono a través del torrente sanguíneo.

Otra proteína valiosa es el arroz. Se extrae del arroz integral, al que se le deja brotar para aumentar su biodisponibilidad y reducir el contenido de antinutrientes (sustancias vegetales que reducen la capacidad del organismo para absorber nutrientes), como taninos y fitatos.

El suplemento VegiDay ®Raw Organic Plant-Based Protein Unflavoured también contiene proteínas de espirulina, ricas en hierro, vitaminas B y manganeso, así como quinoa, que es una buena fuente de magnesio, hierro y fibra.

Beneficios de las proteínas vegetales
→ Son más seguros para las alergias y más fáciles de digerir: la versión a base de plantas es adecuada para personas a quienes los polvos de proteína de suero tradicionales les causan hinchazón y gases. Estos problemas suelen deberse a la lactosa, el azúcar de la leche que provoca flatulencias en quienes sufren intolerancias alimentarias. Aunque es menos común, la lactosa puede causar problemas en la piel como acné y eczema, dolores de cabeza y fatiga. A diferencia del suero, las proteínas vegetales son hipoalergénicas y tienen una biodisponibilidad muy alta.
→ Estimulan el metabolismo: debido a su alto contenido de fibra, las proteínas vegetales tardan más en ser procesadas por el cuerpo que los carbohidratos, las grasas y la mayoría de los demás alimentos de origen animal. Esto no sólo activa, sino que también estabiliza el metabolismo para acelerar la quema de grasa y ayudar a eliminar el exceso de peso.
→ Mantener el equilibrio del pH del cuerpo: con sus excelentes propiedades alcalinizantes, las proteínas vegetales mantienen el equilibrio ácido-base del cuerpo dentro de límites normales. Con su naturaleza altamente ácida, los alimentos de origen animal, incluidos los polvos de proteínas, alteran el equilibrio del pH y, en un intento por restablecerlo, el cuerpo comienza a extraer minerales valiosos de los huesos.

Las proteínas vegetales son una fuente rica de minerales, incluido el hierro, y de numerosas vitaminas. También favorecen el funcionamiento normal del sistema digestivo, equilibran la ingesta calórica y limitan la ingesta de bacterias y enzimas dañinas, como las que normalmente se encuentran en los productos animales.

Forma de administración:
1 dosificador (36,7 g) disuelto en 250 ml de agua o tu bebida favorita (zumo, batido) al día.